Arnold

Arnold, como la mayoría de nuestros niños, llegó a Malayaka House a través de la policía. En septiembre de 2014 Robert recibió una llamada de las autoridades para preguntar si podía hacerse cargo de un bebé de siete meses. Cuando Robert llegó a la comisaría, le contaron que había otro niño, de unos 5 años de dad, que llevaba una semana viviendo en la allí. Sus vecinos decidieron actuar tras ver a su madre y a su padrastro abusar de él y pegarle de manera constante.

Robert decidió llevarse a Arnold a casa, y desde el primer momento todos le llaman Arnoldi. Nunca había ido al colegio y no hablaba inglés cuando llegó, pero aprende rápido, sobre todo desde que empezó a ir al colegio.

Desde el principio, encajó bien con el resto de niños, como si siempre hubiese estado en Malayaka House. Lucas le cuidó mucho y sigue aún actuando como su hermano mayor, enseñándole qué debe y que no debe hacer en casa. A Arnold le encanta seguir a Lucas hasta lo alto de los árboles.

Cuando Arnold llegó comenzamos a enseñarle en casa, cosas básicas en inglés, números, colores… pero no fue hasta que empezó el colegio en febrero de 2015 cuando empezó de verdad a aprender.

Arnold es un niño brillante y muy activo. Es difícil verle descansando si no es porque está durmiendo. Le gusta meterse en líos y una de las palabras que más se escucha en casa es “Aaaarnoldiii!”.

Fue divertido ver como descubría cosas nuevas, como nadar en el lago, beber refrescos, comer pollo o helados, ver una película… y ver cómo disfrutaba de todo ello.

Es feliz en Malayaka House y llegar a casa le ha abierto un nuevo futuro que nadie podía imaginar. Ahora cursa primaria en el colegio Pearl of África con el resto de sus hermanos y hermanas.

Estamos agradecidos de tenerle entre nosotros.