Lucas
En febrero de 2007, la policía se puso en contacto con Robert en relación con un pequeño abandonado, encontrado en una cuneta al borde de la carretera. La policía había estado cuidando al niño durante una semana antes de preguntarle, al no encontrar otra opción, pero terminaron llamando a Robert para ver si tenía espacio para él en Malayaka House. Lucas tendría de aquella en torno a un año y medio, no estaba muy bien alimentado, pero por lo demás, en buen estado de salud.
Malayaka House fue un cambio enorme para Lucas y, en muchos aspectos, demasiado abrumador al principio para él. Es niño introvertido, y aunque quiere mucho a sus hermanos y hermanas, necesita mucha atención y mucho tiempo para sí mismo. Hemos aprendido a darle el espacio que necesita para sentirse cómodo y seguro y a lo largo de los años, se ha convertido en un niño fuerte y confiado. Nuestras niñas más mayores, sobre todo Naiga, cuidan especialmente de él y le aceptan como es. Nos ha enseñado a todos a ser más pacientes, flexibles y comprensivos.
A Lucas le encantan los animales y siempre que hemos tenido un cachorro o un gatito, es quien ayuda a ocuparse de ellos. También cuida de sus conejos, patos y pollitos en la granja que tenemos en casa.
Como muchos niños, al principio percibió la escuela casi como un castigo, pero poco a poco fue encontrando su lugar. Ahora disfruta levantándose con sus hermanos, poniéndose su uniforme escolar, consiguiendo un asiento en ventanilla en la furgoneta y saludando feliz por las mañana a sus profesores. Le suele llevar tiempo adaptarse a nuevos ambientes, pero una vez se siente cómodo, comienza a florecer. Lucas tiene una vena artística, y dibuja muy bien. También le gusta tocar el piano.
Estudia los últimos años de Primaria en Pearl of Africa y saca muy buenas notas. Quiere ser veterinario de mayor, y va en buen camino. Estamos muy orgullosos de ti, Lucas.
Lucas es como Danny y le encanta correr, saltar, bailar, retorcerse, chocar, volar, girar y caerse. Es muy activo y no tiene miedo y verle en acción es emocionante y aterrador. Su actividad favorita es escalar, y es el mejor. Puede trepar a lo más alto de cualquier cosa. Hemos diseñado cuidadosamente las zonas de juego y dispuesto las cuerdas y escaleras lejos de los árboles para mantenerlo alejado de la tentación de escalar, pero aun así él encuentra su camino a las alturas.
Además, Lucas adora a los animales. Tiene una relación muy especial con todos los perros y gatos que tenemos en la casa, especialmente cuando son cachorros, y siempre juega y cuida de ellos.
Lucas ahora está en primaria. En 2014 decidimos darle educación desde casa, con un tutor, para ayudarle con sus problemas de lectura y concentración. Tras un año en esta situación estaba listo para volver al colegio y hoy Lucas disfruta de Pearl of Africa con el resto de sus hermanos y amigos. Vuelve todos los días, se pone a hacer los deberes, y los termina con una sonrisa en la boca.
Aunque todos los niños de Malayaka House disfrutan del tiempo que pasan con Robert, para Lucas es su momento favorito del día. Es feliz simplemente contándole a sus ideas y últimas ocurrencias.
Estamos muy orgullosos de este muchacho. Cuando está contento, su risa y su alegría se escuchan de un extremo a otro de la casa.